Estimado German:

No lo entendí cuando lo publicaste, pensé, que cuando menos, cargarías los peregrinos este año y por eso, por correo, hace un par de días te saludé.

El fin de semana saque finalmente tu regalo e intenté ir a tu casa, espacio de piedra y flores, pero pensé que había mas tiempo. Me equivoqué.

Apenas ayer leía tu evocación a Tlacotalpan la que año tras año visitabas. Te extrañaran.

Se quedo pendiente la publicación de mis cuentos. Seguramente los revisaras mas adelante. Estaremos juntos. Seguro.

Quien diría que además, ayer era hoy.

"YO NO LO SE DE CIERTO, PERO SUPONGO"

Te extrañaran.

Y como ésta fue nuestra última conversación, aquí la dejo,

"Arriba German que hay mucha gente pensando en tí:

Ahí te encontraré. Mañana nos vemos. Todavía nada termina y hay algo en el universo que no permite a los hombres nunca terminar, es más, hay hombres que siempre perdurarán como tú. Guarda reposo como te lo indicaron, nosotros te cuidamos el changarro y seguiremos con tu guía haciendo algo por este México tan olvidado por muchos. Seguramente vestíras otra vez tu uniforme azul y oro sembrando el pánico por todas las canchas de la República y el mundo.

Lo entendemos perfecto.

Lo que nos queda claro es que no podrás contestar tantos correos como recibirás.

Recibe un abrazo muy fuerte de tu servilleta.

Tu alumno permanente de ya pasados los 54"

Buen viaje.